Antonio , Conde Yndiano de Ballabriga
Carta 51
“Política viene de la voz griega que significa ciudad , de donde se infiere que su verdadero sentido es la ciencia de gobernar los pueblos “ y los políticos son aquellos que están en semejantes encargos o , por lo menos , en carrera de llegar a estar en ellos . En este supuesto , aquí acabaría este artículo , pues venero su carácter ; pero han usurpado este nombre estos sujetos que se hallan muy lejos de verse en tal situación ni merecer tal respeto . Y de la corrupción de esta palabra mal apropiada a estas gentes nace la precisión de extenderme más .
Políticos de esta segunda especie son unos hombres que de noche no sueñan y de día no piensan sino en hacer fortuna por cuantos medios se ofrezcan .
Las tres potencias del alma racional y los cinco sentidos de cuerpo humano se reducen a una desmesurada ambición en semejantes hombres . No quieren ni entienden , ni se acuerdan de cosa que no vaya dirigida a este fin . La naturaleza pierde toda su hermosura en el animo de ellos . Un jardín no es fragante , ni una fruta es deliciosa , ni un campo es ameno , ni un bosque es frondoso , ni las diversiones tienen atractivo , ni la comida les satisface , ni la conversación le ofrece gusto , ni la salud le produce alegría , ni la amistad les da consuelo , ni el amor les presenta delicia , ni la juventud les fortalece . Nada importan las cosas del mundo en el día , la hora ,el minuto , que no adelantan un paso en la carrera de la fortuna .Los demás hombres pasan por varias alteraciones de gustos y penas ; pero éstos no conocen más que un gusto , y es el adelantarse , y así tienen, no por pena , sino por tormentos inaguantables , todas las varias contingencias e infinitas casualidades de la vida humana . Para ellos todo inferior es un esclavo , todo igual es un enemigo , todo superior es un tirano . La risa y el llanto en estos hombres son como las del río que han pasado por parajes pantanosos ; vienen tan turbias , que no es posible distinguir su verdadero sabor y color . El continuo artificio , que ya se hace segunda naturaleza en ellos , los hace insufribles aun en si mismos . Se piden cuenta del poco tiempo que han dejado de aprovechar en seguir por entre principios el fantasma de la ambición que les guía . En su concepto , el día es corto para sus ideas , y demasiado largo para los de los otros. Desprecian al hombre sencillo , aborrecen al discreto , parecen oráculos al público , pero son tan ineptos , que un criado inferior sabe todas sus flaquezas , ridiculeces , vicios y tal vez delitos , según el muy verdadero proverbio francés , que ninguno es héroe para con su ayuda de cámara . De aquí nace revelarse tantos secretos , descubrirse tantas maquinaciones y , en substancia , mostrarse los hombres ser hombres , por más que quiera parecerse a semidioses.
En medio de lo odioso que es y debe ser común de los hombres el que está agitado de semejante delirio , y que a manera del frenético debiera estar encadenado porque no haga daño a cuantos hombres , mujeres y niños encuentre por las calles , suele ser divertido su manejo para el que lo ve de lejos . Aquella diversidad de astucia , ardiles y artificios es un gracioso espectáculo para quien no le teme . Para lo que no basta la paciencia humana , es para mirar todas estas máquinas manejadas por un ignorante ciego , que se figura a sí mismo tan incomprensible como los demás le conocen necio . Creen muchos de éstos que la mala intención puede suplir al talento , a la viveza , y al demás conjunto que se ven en muchos libros , pero en pocas personas .
José Cadalso; " Cartas Marruecas "
Crestomatia del Conde Yndiano de Ballabriga.
20 de Abril 2011.